Amb la publicació, avui, de l’Ordre SND/726/2023, de 4 de juliol, es dona per finalitzada la situació de crisi sanitària ocasionada per la COVID-19.
Així doncs, deixen d’estar vigents totes les mesures preventives de tipus extraordinari, com l’obligatorietat de l’ús de les mascaretes.
“Por último, en los centros residenciales de personas mayores y personas con discapacidad, entornos en los que viven las personas más vulnerables, aunque no se recomiende el uso universal de las mascarillas, se considera necesario tomar precauciones adicionales en caso de aparición de síntomas en trabajadores, residentes o visitantes, para evitar brotes, cuidando en todo caso el bienestar de los mayores tanto a nivel físico como emocional.”